14. Por qué no se puede tomar este don espiritual de forma visible

No puedes, sin embargo, tomar este don espiritual visiblemente, oh hombre, como si comieras carne visible y visible sangre bebieras, pues podredumbre de estiércol eres; pero igual que el espíritu vivo es en ti invisible, también es invisible este sacramento vivo en la oblación que has de recibir invisiblemente, porque lo mismo que el cuerpo de Mi Hijo surgió en el útero de la Virgen, así ahora la carne de Mi Unigénito se eleva en la santificación del altar. ¿Qué quiere decir esto? El invisible espíritu humano recibirá invisiblemente este sacramento, invisible en la oblación, mientras que el visible cuerpo humano tomará visiblemente la oblación, visible en este sacramento, aunque ambas cosas son una sola, igual que el Cristo Único es Dios y Hombre, y como el alma racional y la carne mortal forman un único ser humano; por tanto, aquel que Me contemple con recta fe cuando reciba este sacramento, lo habrá tomado fielmente, para santificación suya. ¿Qué quiere decir esto?
Mi Hijo nació milagrosamente de una Virgen inmaculada cuya carne jamás se encendió en la dulzura del placer y permaneció intacta; porque todo pureza era el receptáculo de esta Virgen, en el que quise que Mi Unigénito se encarnara. No dejé, pues, que el vaso de esta suave Virgen se derramara por el fuego del ardor: mira que en él Mi Hijo recibió milagrosamente un cuerpo humano.